Tan fácil que es dar gracias cuando todo está bien, pero que difícil es dar GRACIAS cuando no recibimos lo que esperamos, o cuando simplemente las cosas no marchan bien.
La Palabra de Dios nos dice que debemos de dar gracias en todo. Pero ¿Cómo podemos dar gracias cuando hay situaciones difíciles y dolorosas? Realmente la palabra de Dios no se puede razonar, debe de ser revelada por medio del Espíritu Santo, y obedecerla.
Cuando las situaciones familiares, económicas o de salud son negativas, el cerebro envía un mensaje a la lengua que lo que dice es “hora de quejarse” pero Dios dice, es hora de dar gracias.
"El estar siempre dando gracias a Dios nos beneficia"
Debemos siempre de mantener principios de vida cerca de nuestro corazón, pero no solo como teoría sino más bien como práctica.
Ser agradecido es reconocer que todo lo que proviene de Dios es bueno y es perfecto. El estar siempre dando gracias a Dios nos beneficia ya que nuestro espíritu permanece “encendido”.
Algunos beneficios al dar gracias a Dios:
Dar gracias transforma nuestras vidas.
La gratitud nos recuerda que Dios nunca nos abandonará.
Nos ayuda a someter nuestra vida a Dios.
Dar gracias transforma a la ansiedad y la preocupación en paz sobrenatural.